Es
importante precisar que la lonchera o refrigerio escolar es un tiempo de
comida, cuya función es contribuir al aporte de nutrientes de calidad en la
alimentación del niño y que no puede reemplazar el desayuno, el almuerzo o la
cena.
Los
padres de familia deben comprender que las inadecuadas prácticas de
alimentación, además de comprometer la salud y la vida de los niños, tienen
graves consecuencias en su crecimiento y desarrollo y determinan, en gran
medida, la salud en la vida adulta y su productividad.
¿Qué
se debe evitar?
Alimentos
industrializados o de bajo aporte nutricional, así como el alto consumo de
carbohidratos simples o de rápida absorción como dulces, bombones y productos
con mucho dulce. Comidas rápidas como hamburguesas, perros calientes y pizza,
debido al alto aporte de grasa y sodio. También embutidos como salchichas, salchichón,
mortadela y jamón, a causa del contenido de sodio y nitritos, que son
perjudiciales en altas cantidades para la salud y el crecimiento de los niños.
¿Qué
debe tener la lonchera?
Usa alimentos de
los diferentes grupos: energéticos, reguladores y formadores. Energéticos como galletas
integrales o algún otro cereal, por ejemplo en barritas, pan o fruta.
Reguladores como frutas, preferiblemente entera o en pedazos, y también
verduras picadas, cocidas o crudas. Formadores como leche, yogurt o quesos
semidescremados, huevo, jamón de pollo o pavo bajo en grasa. Siempre puedes
incluir agua.
No hay comentarios:
Publicar un comentario